Palabras de Charles

Mi viñedo se ha convertido en mi jardín y mi vino es el fruto de mi felicidad en este barrio de Trouilh, barrio del pressoir en Bearnais.

Mi vid crece en un paisaje impresionante todas las mañanas del año, frente al pico de Orhy y al pico de Anie, con la nieve cuando podo, los torrentes cuando la vid florece, las laderas rojas en la época de la cosecha…

Sabéis que soy un agricultor, apegado a este país y a este paisaje, más que un poeta, pero creedme cuando digo que quiero y encuentro, en nuestro vino, los personajes de este país.

Tranquilo, paciente con la naturaleza, convencido de que la belleza y el bien están unidos, a menudo acompañado por mis amigos epicúreos, siempre apasionados por esta tierra y por esta profesión, llenos de gratitud por el equipo – Gérard, Jean Marie, Jonathan y Marie Pierre – con el que he trabajo que es más que familia para mí…. Reconozco mi felicidad y me he convertido en el guardián en movimiento de este jardín.

Toda esta felicidad, esta belleza y esta emoción, quiero compartir… están, gracias a la alquimia del chai, en los vinos de Clos Uroulat, y te están esperando…

 

Charles
Hours